BACH Business Center procura aprovechar su innigualable ubicación para evaluar su relación fisionómica y buscar un sentido de equilibrio, que le permita un arreglo integral. Se compone de dos elementos principales, que por su proximidad, es necesario desplazar entre sí, para realzar sus diferencias. Ambos volúmenes conservan una proporción semejante, creando una percepción estable a través de la preservación de figura.

 

En sentido gráfico, ambos elementos buscan distinguirse a través del movimiento aparente producido por el arreglo de sus piezas, creando  patrones con rasgos simples y regulares, que exploran metafóricamente la técnica de contrapunto a través de su continuidad, buscando crear fenómenos distintos en el tiempo. En este sentido, su carácter pretende ser barroco, sustentando sus intenciones urbanísticas y de comercialización.